Caminé como
13 kilómetros hoy según el señor maps, una fila interminable de autos siguió el
cortejo desde la Intendencia de Montevideo.
En la
explanada a mediodía todos esperábamos en silencio, roto de a ratos con
momentos de aplausos cuando pasaba algún auto con banderas y a las bocinas para
festejar toda una época, que hace muy poquito que terminó, y como si hubiera
que darle un final, en la madrugada de este domingo 6 de diciembre de 2020
moría Tabaré Vázquez, el último presidente de la izquierda uruguaya.
Bastante tuve
para reprocharle, pero mucho más fue lo
positivo que pasó en los primeros 5 años de gobierno, esa noche en que salimos
a festejar por una dieciocho de julio llena de lado a lado, en la que nos
sumábamos miles y miles con la esperanza intacta y la alegría por consigna,
pasaron quince años, volvió la derecha y en este día la tristeza se dejó sentir
aún más que lo que se venía sintiendo desde marzo.
Cuando
subió el coche fúnebre por Barrios Amorín nos pusimos a uno y otro lado de la
vereda para despedirlo. Apenas apareció llovieron los aplausos, la gente siguió
el cortejo por toda la principal avenida de Montevideo y se dejó escuchar bien
fuerte, salido del fondo de todos y todas aquel: " y ya lo ve, y ya lo ve,
el Presidente es Tabaré", como aquella noche en que ganamos la Presidencia
en las elecciones y seguimos caminando por Libertador y en frente del Palacio
le dediqué el último saludo y el penúltimo gracias.